La llamada Industria 4.0 o Cuarta Revolución Industrial ha supuesto un profundo cambio en el paradigma del consumo. Los consumidores han pasado de ser meros receptores de información, para pasar a ser “prosumidores”, consumidores con un alto poder de persuasión y capacidad de influencia sobre las propias marcas, que se han visto obligadas a aceptar una relación bidireccional y a tomarla como natural.
La aparición y asentamiento de algunas plataformas como las Redes Sociales, han puesto al consumidor en el centro de la acción, cambiando por completo modelos de negocio de muchos tipos de compañías que se han enfocado en buscar lo mejor para sus clientes y consumidores.
Todos y cada uno de los sectores han ido percibiendo estos cambios y por supuesto, el mundo de la banca no se ha quedado atrás, ya que ha tenido que adoptar la innovación que trae de la mano el desarrollo de nuevas tecnologías. De este modo, el mundo bancario poco o nada tiene que ver con el antiguo formato, en el que era necesario acudir a la sucursal bancaria para realizar cualquier tipo de cambio o gestión.
Así pues, todo se ha readaptado con el objetivo de trabajar en un modelo de negocio en el que el cliente esté en el centro de todo nuestro negocio ofreciéndole un entorno multicanal, adaptado a sus necesidades y a los tiempos que corren, que está disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Para poder dar un paso al frente, lo más importante es conocer al máximo a nuestros clientes y para ello es imprescindible recopilar y procesar información que nos ayude a segmentar de la manera adecuada a cada cliente, detectar sus necesidades y anticiparse a ellas.
Así, el open banking pretende optimizar el sector de la banca y proporcionar a los particulares un mayor poder sobre sus datos financieros. Pero, ¿qué es concretamente el open banking?
¿Qué es el open banking?
Se trata de la apertura de la información bancaria a terceros, a partir de una interfaz de programación de aplicaciones en abierto (API, por sus siglas en inglés), regulado por la segunda directiva europea de servicios de pago (PSD2).
El sector bancario tiene en su poder información valiosa de todos sus clientes, por ello esta legislación les obliga a compartirla poniendo a disposición de terceros sus datos. Esto se traduce en transferir la propiedad de los mismos, que pasan a pertenecer al propio cliente, que puede autorizar o no su uso a otras organizaciones. De forma paralela, estos terceros tendrán que prestar nuevos servicios, convirtiéndose primero en entidades reguladas que tendrán que ser supervisadas por el Banco de España. ¿Y cuáles son las ventajas del open banking?
Ventajas del Open Banking
En los tiempos que corren, donde la eficiencia es un bien preciado, el open banking puede ser el aliado perfecto mejorar la agilidad en todos los procesos de tu negocio. Si bien es cierto que algunos clientes pueden estar dubitativos ante la cesión de sus datos a terceros, la realidad es que esta cesión podrá agilizar y simplificar muchos de los procesos como, por ejemplo, la solicitud de crédito instantánea, las mejoras de condiciones de financiación e inversión o, incluso, optar a la posibilidad de acceder a promociones específicas ajustadas a cada cliente.
Gracias al open banking, se mejorará la protección de nuestros clientes ofreciéndoles un servicio hecho a su medida gracias al conocimiento que poseen de los mismos. Asimismo garantizamos una mejor optimización de nuestros procesos y por ende, mejoraremos la agilidad a la hora de realizar las gestiones. También ofrecerá una visión más realista y gráfica de cómo está el estado financiero de su entidad, agilizando la toma de decisiones de negocio.
Entre los más beneficiados encontramos al sector inmobiliario ya que al tener la información de sus potenciales clientes, esto les permitirá analizar su situación real teniendo la posibilidad de firmar hipotecas dentro de una plataforma online.
Sin duda, el open banking ha supuesto un profundo cambio en el paradigma actual bancario, ya que ofrece muchas simplicidades en los procesos y en los tiempos a todos los actores que tienen involucración en el proceso.
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